Fin de semana en la serranía de Cuenca

Una de las ventajas que tiene Madrid es que está muy bien situada para visitar otras provincias.

Este fin de semana hemos podido disfrutar en compañía de unos amigos de la Naturaleza en estado puro. Hemos estado en una casa rural en El Tobar.

Desde ahí hemos hecho rutas por una laguna que hay en sus alrededores, el río Escabas, las hoces de Beteta, etc.  Ha sido una delicia poder pasear en medio del bosque, alejados de la "civilización", cruzando aquí y allá por medio de un río, bañándonos en pozas de aguas cristalinas, algo fresquitas pero muy apeticibles ahora en verano. 

Te quedas embobado viendo las truchas, mariposas, libélulas de brillantes colores. Sentir cómo los pececitos intentan "morderte" los dedos :-) Llenar los pulmones de aire, disfrutar de la vista de las plantas, insectos, aves..., escuchar el murmullo del agua y el susurro del viento entre los árboles. Perderse en medio del bosque sin que nadie nos moleste, es realmente único. Me recordaba a esos documentales de ensueño que uno piensa que están fuera del alcance de la mano. También hemos aprovechado para disfrutar del cielo nocturno, aunque no hemos podido ver tantas estrellas como habríamos querido,

pues la luna iluminaba demasiado, pero para un inexperto como yo ha sobrado y además he visto una galaxia cerca de la constelación de Casiopea :-) En resumen una excursión de esas que te llenan de energía. Qué pereza tener que retornar al trabajo, menos mal que la próxima semana me pillo vacaciones y regreso al campo :-)