Mis vacaciones: Benidorm

Hay que ver cómo pasa el tiempo de rápido. Ya hace una semana larga desde el último post, así que habrá que irse poniendo las pilas. Ahora voy a tirar de mi repertorio de fotos de este verano. Las fotos son de Benidorm (Alicante), en donde pasamos unos días aprovechando que nos salía gratis el alojamiento (pues mis padres habían ido a pasar unos días en un apartamento). Para empezar una foto de un "pajarito", que se la debía a Câline. No es una paloma o un gorrión como era habitual, pero después de la magnífica paloma condecorada que me regaló necesitaba una compañera de su talla. Además la acompaño de una farola, que es uno de mis motivos preferidos :-)

 Y ya que estamos con las farolas, aquí va otra de una farola blanca me encantó:

 Como el último post fue de puestas de sol, vamos a poner alguna que otra fotillo del estilo, en reconocimiento de que no sólo se puede disfrutar de ellas en Madrid.

No me ha gustado mucho Benidorm, y no creo que repita, está completamente masificado todo. Con edificios inmensos, las playas sin sitio para pasear, ..., algo que calificaría de crimen medioambiental.

 

Supongo que será como todo, y que habrá a quien le guste, lo cierto es que yo iba en plan tranquilo y no he aprovechado la marcha nocturna, a lo mejor ese es el aliciente para muchas personas.

He de reconocer que el agua de mar era preciosa, azul transparente, y además, quien la busca la encuentra, y nosotros encontramos

una cala preciosa que hay al lado de la playa de Levante, que por tener un acceso un poco más difícil no estaba repleta. Me sorprendió gratamente ver cómo a ella acudían bancos de peces, y si te sumergías con unas gafas de bucear podías ver que te rodeaban. Mucha gente llevaba pan y les daba de comer con las manos. Lástima de no tener una cámara acuática.